Domingo 13 - Domingo 6º de Pascua. Blanco.
PRIMERA LECTURA
Hech 10, 25-26. 34-36. 43-48
Lectura de los Hechos de los apóstoles.
Cuando Pedro entró a la casa del centurión Cornelio, éste fue a
su encuentro y se postró a sus pies. Pero Pedro lo hizo levantar, diciéndole: "Levántate,
porque yo no soy más que un hombre". Después Pedro agregó:
"Verdaderamente, comprendo que Dios no hace acepción de personas, y que en
cualquier nación, todo el que lo teme y practica la justicia es agradable a él.
Él envió su Palabra al pueblo de Israel, anunciándoles la Buena Noticia de la
paz por medio de Jesucristo, que es el Señor de todos. Todos los profetas dan
testimonio de él, declarando que los que creen en él reciben el perdón de los
pecados, en virtud de su Nombre". Mientras Pedro estaba hablando, el
Espíritu Santo descendió sobre todos los que escuchaban la Palabra. Los fieles
de origen judío que habían venido con Pedro quedaron maravillados al ver que el
Espíritu Santo era derramado también sobre los paganos. En efecto, los oían hablar
diversas lenguas y proclamar la grandeza de Dios. Pedro dijo: "¿Acaso se
puede negar el agua del bautismo a los que recibieron el Espíritu Santo como
nosotros?". Y ordenó que fueran bautizados en el nombre del Señor
Jesucristo. Entonces le rogaron que se quedara con ellos algunos días.
Palabra de Dios.
SALMO
Sal 97, 1-4
R. El Señor reveló su victoria a
las naciones.
Canten al Señor un canto nuevo, porque él hizo maravillas: su
mano derecha y su santo brazo le obtuvieron la victoria. R.
El Señor manifestó su victoria, reveló su justicia a los ojos de
las naciones: se acordó de su amor y su fidelidad en favor del pueblo de
Israel. R.
Los confines de la tierra han contemplado el triunfo de nuestro
Dios. Aclame al Señor toda la tierra, prorrumpan en cantos jubilosos. R.
SEGUNDA LECTURA
1Jn 4, 7-10
Lectura de la primera carta de san Juan.
Queridos míos, amémonos los unos a los otros, porque el amor
procede de Dios, y el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios. El que no ama
no ha conocido a Dios, porque Dios es amor. Así Dios nos manifestó su amor:
envió a su Hijo único al mundo, para que tuviéramos Vida por medio de él. Y
este amor no consiste en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos
amó primero, y envió a su Hijo como víctima propiciatoria por nuestros pecados.
Palabra de Dios.
Aleluya. "El que me ama será fiel a mi palabra, y mi Padre
lo amará e iremos a él", dice el Señor. Aleluya.
EVANGELIO
Jn 15, 9-17
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Juan.
Durante la última Cena, Jesús dijo a sus discípulos: "Como
el Padre me amó, también yo los he amado a ustedes. Permanezcan en mi amor. Si
cumplen mis mandamientos, permanecerán en mi amor, como yo cumplí los
mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Les he dicho esto para que mi
gozo sea el de ustedes, y ese gozo sea perfecto. Éste es mi mandamiento: Ámense
los unos a los otros, como yo los he amado. No hay amor más grande que dar la
vida por los amigos. Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando. Ya no
los llamo servidores, porque el servidor ignora lo que hace su señor; Yo los
llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que oí de mi Padre. No son
ustedes los que me eligieron a mí, sino yo el que los elegí a ustedes, y los
destiné para que vayan y den fruto, y ese fruto sea duradero. Así todo lo que
pidan al Padre en mi Nombre, él se lo concederá. Lo que yo les mando es que se
amen los unos a los otros".
Palabra del Señor.
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